"Año del Bicentenario, de la consolidación de nuestra Independencia, y de la conmemoración de las heroicas batallas de Junín y Ayacucho"

,   

Comunicados y Notas de Prensa

Fitch mantuvo la calificación de largo plazo de Perú y es el único país en la región que no ha tenido una rebaja de calificación crediticia en moneda extranjera

Lima, 15 de diciembre del 2020.- La agencia Fitch mantuvo la calificación de la deuda de largo plazo en moneda nacional y extranjera en BBB+, con lo cual el Perú es el único país en América Latina al que no se ha realizado una rebaja de su calificación de la deuda de largo plazo en moneda extranjera, desde que obtuvo el grado de inversión en octubre del 2007 por primera vez, por parte de una clasificadora de riesgo.

Sin embargo, realizó un cambio en la perspectiva a negativa respecto a su reporte de junio, cuyos determinantes son principalmente: (i) el deterioro de la previsibilidad de las políticas como resultado de la aprobación de medidas populistas por parte del Congreso en los últimos meses y (ii) la expectativa de desafíos continuos para reducir los déficits fiscales a niveles consistentes con la estabilización de la deuda.

Fitch reconoció que las sólidas instituciones macroeconómicas de la República, como el Ministerio de Economía y Finanzas y el Banco Central de Reserva del Perú, y su fortaleza fiscal y monetaria, continúan respaldando las calificaciones.

La decisión por parte de Fitch se da solamente pocos días después de que otras dos agencias calificadoras del mundo, Standard and Poor’s (en un “rating action”) y Moody’s (en una revisión periódica y no “rating action”), mantuvieran sus calificaciones para Perú con perspectiva estable, y aunque consideran que el impacto del coronavirus es extremo pero temporal, ven con mayor optimismo el futuro de la política peruana y la vuelta a la normalidad.

Standard and Poor’s, en un “rating action”, manifestó que esperaría (i) que el nombramiento de Francisco Sagasti como presidente de la República estabilice el panorama político hasta las elecciones programadas para abril de 2021, (ii) que los sólidos fundamentos macroeconómicos y la recuperación a partir de 2021 deberían respaldar la calidad crediticia de Perú y (iii) que el sólido marco macroeconómico de Perú se mantiene y mitigará los riesgos macroeconómicos derivados de la pandemia del COVID-19 y la incertidumbre política.

Moody’s, en una revisión periódica para varios países y no de “rating action”, dijo que el perfil crediticio de Perú (calificación de emisor A3) está respaldado por (i) la fortaleza económica del país, (ii) las instituciones que determinan la política fiscal y macroeconómica y (iii) su fortaleza fiscal, que es una fortaleza crediticia clave.

“En el Perú no se han modificado ni los principios ni los sólidos fundamentos que en las últimas 3 décadas nos han permitido llegar a los actuales niveles de solidez financiera y macroeconómica” manifestó el ministro de Economía y Finanzas Waldo Mendoza.

Aunque una serie de fortalezas macroeconómicas han permitido al Perú reaccionar contra el impacto económico y social del coronavirus, tanto con recursos propios como de endeudamiento; hoy hay preocupación en Fitch Ratings sobre la inestabilidad que las medidas adoptadas por el Congreso y la falta de cohesión política pueden traer al futuro de la economía, por lo que han decidido rebajarle al Perú la perspectiva de estable a negativa.

El ministro Waldo Mendoza dijo que “el Perú ha gestionado el endeudamiento de manera responsable y lo viene haciendo aún en medio de la emergencia sanitaria. El choque pandémico que ha contraído el PBI y ha agravado las necesidades de financiamiento para enfrentar esta crisis han conducido a un mayor ratio de Deuda/PBI, el cual está por debajo de la mayoría de países de la región”, agregó.

Al respecto, es necesario mencionar que las medidas que se impulsen para enfrentar los efectos negativos de la pandemia no deben impactar negativamente en el futuro fiscal ni la estabilidad económica.





OFICINA DE COMUNICACIONES